La Casa Blanca lleva a los tribunales la redistribución de distritos en el estado de California

El Gobierno de Donald Trump presentó una demanda contra el estado de California por el plan de redistribución de distritos aprobado mediante la Proposición 50.

La Casa Blanca argumenta que la medida, que podría otorgar cinco escaños adicionales al Partido Demócrata en el Congreso, viola la Constitución al basarse en criterios raciales que favorecerían a la población latina. La iniciativa estatal fue respaldada el 4 de noviembre por el 64,4 % de los votantes.

El Departamento de Justicia señaló que existen pruebas de que la Legislatura de California diseñó un mapa electoral con predominio de criterios raciales, lo que, según la demanda, vulneraría la Cláusula de Igualdad de Protección. La fiscal general, Pamela Bondi, afirmó en un comunicado que el plan busca ampliar el poder de un solo partido y que el DOJ actúa para impedir que los nuevos mapas influyan en las elecciones de medio término.

La acción judicial se presenta en medio de disputas entre la Casa Blanca y el gobernador Gavin Newsom, quien respaldó la Proposición 50 con apoyo de figuras del Partido Demócrata, incluido el expresidente Barack Obama. La redistribución impulsada por el estado afectará zonas donde el Partido Republicano ha mantenido presencia histórica, como el Valle Central de California.

El Gobierno federal sostiene que la demanda responde a los cambios electorales en varios estados. En Texas, los republicanos también buscan asegurar nuevos escaños mediante ajustes en los distritos, mientras otros estados demócratas analizan medidas similares a las de California. La Casa Blanca había anticipado que llevaría a los tribunales el plan californiano, diferenciándolo de los procesos aprobados por legislaturas estatales con mayoría republicana.